El mal carácter del cubano William Levy le pasa factura. Será el calor, las largas jornadas de trabajo y las duras escenas en el agua... Lo cierto es que el actor en ocasiones está más irritado de lo normal.
A través de diversas fuentes de la comunicación ha llegado que el protagonista de La Tempestad protagonizó la semana pasada un auténtico espectáculo en los estudios de San Angel, mientras estaba comiendo, cuando uno de los empleados de Televisa quiso fotografiarlo.
La noticia cuenta que el cubano no pudo controlarse y zarandeo al empleado exigiendole que borrase las fotos. Ante la negativa, Levy le arrebató el teléfono y al ver que no había foto alguna salió airoso gritando a todo el que allí estaba presenciando la escena, que nadie podía sacarle fotos sin su consentimiento.
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